EL GATO DESAPARECE EN LA COCINA DE SORIN +TARDE DE TE Y SUSHI

Querrán saber qué relaciona lo primero con lo segundo... Ah, es el misterio que también encierra la película de Carlos Sorín, "El Gato Desaparece". No me voy a extender mucho porque si la vieron ya sabrán de qué se trata.

Resulta que al personaje de Luis Luque, que sufre un trastorno psicológico, le gusta cocinar sushi, y se lo ve en la película y la relación es que el sábado 10 de noviembre, no cocinó Luis Luque pero comimos riquísimo sushi en FuraiBo Japanese Resto & Tea House y tomamos los tés chinos y japoneses top de la mano de El Club del Té.

Vamos con mi opinión sobre el felino intermitente: La vi con esa reticencia o el prejuicio de quien ha visto otras películas del mismo director y lo reconoce automáticamente por su sello (Historias Mínimas, El Perro o El Camino de San Diego) donde lo cotidiano y los paisajes en un principio de la Patagonia y luego del noreste argentino abren "la ventana" (otro de los títulos más recientes de Sorin) a su buena cinematografía. En este caso lo veo como un Hitchcock que se escapa del blanco y negro y juega con los miedos, con la mente, con lo que es real y con lo que es una alucinación. Hablé de Luis Luque, que pensar que nació con los galancitos y ahora tiene papeles duros y bastante lejos de la novelita de la tarde y por el otro lado, Beatriz Spelzini, a quien hace un tiempo no veíamos por las pantallas y es otra pieza fundamental de la trama y el desarrollo del personaje desde su psicología. No sabremos en realidad y a medida que avanza el metraje quién está más loco y la locura puede saltar a la pantalla con el gatito Donatello que es clave y acertijo del filme.

Dice Sorín a Ezequiel Obregón en una nota que recomiendo del sitio EscribiendoCine:
"...cuando trabajo el guión, lo hago ubicándome en el lugar del espectador. Y siempre pienso, “¿no lo estaré informando mucho, o poco, no lo estaré aburriendo?”. En general, me funciona. Lo que veo que pasa resulta bastante parecido a lo que yo pensé que tenía que pasar. Mis últimas tres películas tienen una información muy escasa, se explica muy poco. Lo imprescindible para entender lo general. Cada espectador, con su historia personal, completa las lagunas de la película. Necesito un espectador activo. Cuando construyo el guión trato de dejar la menor cantidad de cosas cerradas. Manejo una ambigüedad pero contando una historia concreta."

Nicolás Sorín, el hijo del director, se encarga de la música y como siempre es un acierto y en la difícil tarea dirección de arte la tendremos a Margarita Jusid que colabora mucho en el éxito de esta peli que sin una tarea concienzuda en este campo podría haberse transformado en todo lo contrario.

Parece que en "Días de Pesca", su última película que se estrenó el jueves pasado en Buenos Aires (15-NOV-2012), Carlos Sorín, -el director del sur-, vuelve a la Patagonia y continúa en esta manera de filmar que se acentuó en El Gato Desaparece haciendo cómplice al espectador. No es una peli larga, está bien actuada, engancha con su suspenso pero es rara viniendo de Sorín. De todas éstas que nombré, les recomiendo "El Camino de San Diego", fantástica por descubrir esas cosas pequeñas que nos van haciendo en nuestra cultura y según la geografia que nos ve crecer.


Ahora la cita que RECIPes tuvo en este lugar tan especial que es FuraiBo, templo y a la vez casa de té y restó en el casco histórico de Buenos Aires.

Esta vez Victoria Bisogno, Presidente del Club del Té, nos presentó variedad de tés verdes con su complejidad de sabores y aromas aprendiendo a maridarlos con lo salado: sushi rolls vegetarianos y con pescado y con dulces japoneses (que no son tan dulces como los occidentales).
Desde cómo llegó el té a Japón hasta sus diferencias en el tratamiento de las hojas para lograr la materia prima de esta infusión, fueron algunos de los temas que nos dieron a conocer un poquito más sobre la vasta cultura dentro del mundo de la camelia sinensis.

Les dejo algunas fotitos para que se tienten y si andan cerca de Alsina y Defensa se den una vueltita para probar cosas que a lo mejor hasta ahora ni se hubieran animado, por ejemplo: una bebida a base de Aloe Vera y miel o un helado de wasabi o por qué no el helado de crema americana con polvo de matcha (té verde, el único que se puede considerar "comida" y no bebida). Itadakimasu! (Algo así como nuestro "Buen Provecho!").
Vicky prepara el té







Fotos de Pablo Recondo
Hasta nuestro próximo RECIPes, chau, chau!

Comentarios

Entradas populares